30 de diciembre... solo unas horas y este año se acaba, dejando un sin fin de vidas ademas de muertes y cambios climáticos abruptos.
Antes no creía en agüeros pero este año ha traído tantos cambios radicales, que recibiré el año con un dolar en el bolsillo, co
meré doce uvas a las 12, y no serán calzones pero si una camiseta amarilla redundante que dice YELLOW la que tenga puesta, ademas de mi usual carta de deseos y peticiones, que hace un par de años quemo junto a un simpático muñequito, un mini año viejo, que hasta da pesar hacerlo cenizas.
Me preparo entonces para un nuevo año, un año mas mágico y por lo visto sorpresivo y agitado, lo que me agrada de sobremanera. En este momento estoy escribiendo un mensaje a cada persona que este año estuvo en mi vida o paso un rato, y enserio es algo gratificante y alent
ador, les recomiendo que lo hagan, son esos detalles innecesarios los que nos unen y nos recuerdan lo que realmente hicimos durante 365 días, con lo bueno hay que sonreír y repetirlo, con lo malo hay que reflexionar pero sobre todo agradecer, la fortuna es tan impredecible...